miércoles, 28 de marzo de 2007
Foro semanal ¿ A que le temes mas?
lunes, 12 de febrero de 2007
El Hombre Solo
Adaptación Por: El Joven Kappus
La mas dolorosa soledad es la del abandono del amor. Como el amor es esférico, o sea, que se ama por todos lados, esferoidal, el dolor entonces es también esférico, o planetario, como diría Neruda. La ausencia del amante toma la forma del sufrimiento: ansiedad, angustia, insomnio, terror, son maneras doloridas de esta soledad. La cama inmensa se queda uno con la palabra en la boca, extiende un brazo hacia la almohada que no tiene a nadie recargando la cabeza.
Los cables invisibles que unían a los amantes se quiebran, dejan heridas en distintas partes del espíritu. Ni beber alcohol aminora la soledad; a veces solo queda el camino de los barbitúricos, o salir de la bañera en forma de cadáver. Cuando la soledad se vuelva nostalgia y se llora con cada parte del cuerpo, el amante sobrevivirá a ésta soledad, saldrá poco a poco de su cueva interior arrastrando su duelo. Pero no habrá muerto de amor, como la niña de Guatemala.
Existen la s personas que están solas, a pesar de encontrarse rodeadas de gente. No se sienten individuo ni grupo. Un instrumento punzocortante espiritual, que le pincha el alma, le echa a perder la fiesta, la reunión, la carta de amor, demasiadas noches de los convites. Después, en la soledad sola, se recriminará no haber abierto la boca, saludado a la persona agraciada ni despedirse de nadie cuando se fue. A este tipo de solitario le vendría bien este pensamiento de Nietzche: "En medio de la multitud vivo como la mayoría y no pienso como pienso; al cabo de cierto tiempo, acabo por experimentar el sentimiento de que se me quiere desterrar de mí mismo y quitarme mi alma, y empiezo a malquerer a todo el mundo y a temer a todo el mundo. Entonces, tengo necesidad del desierto para volver a ser bueno" Sin embargo, hay gente que se siente en soledad dentro de una colectividad, pero plena de sí misma, satisfecha con su intimidad contenida. Saluda, se informa y se va con la mayor tranquilidad. A él también le toca un pensamiento de Nietzche: "Amigo mío, refúgiate en tu soledad", o "Guárdense de ofender al solitario"
El ermitaño ha elegido su soledad quizás para ensimismarse, para profundizar en su pensamiento o para encontrarse con estados espirituales selectos. Es probable que no tolere a la multitud, como le sucedió al revolucionario pintor venezolano Armando Reverón, quien construyó un castillete a las orillas del mar, hizo esculturas de personas que no hablaban, o un teléfono de cartón con el cual se comunicaba con Goya. A este tipo de hombre no le caería mal este otro pensamiento del mismo Nietzche: "Todo hombre de elección aspira instintivamente a su torre de marfil, a su reclusión misteriosa, por la que se libera de la masa, del vulgo, del gran número, porque en ella puede olvidar la regla >>hombre<<, puesto que él es una excepción a esta regla. Mas allá del bien y del mal"
El Infierno
Por: El Yeti Maldito
Un día un hombre murió y fue a dar al infierno, en donde en la entrada lo esperaba un personaje vestido de negro con un gran sombrero, el cual lo condujo por un camino que llevaba a una gran sala, parecida a un cine en donde la cual al fondo se podía ver una gran pantalla rodeada por varios asientos en forma de media luna, llegando a los asientos de enfrente el personaje de negro ordeno al hombre a sentarse y acto seguido la pantalla se prendió y el hombre pudo reconocer que lo que se estaba proyectando era su vida, pero no como fue sino como hubiera sido si se hubiera atrevido a hacer todas esas cosas que postergo, esas cosas que siempre son para mañana y al día siguiente siguen siendo para mañana, vio aquella chava en la secundaria a la que nunca se atrevió a hablarle y confesar que estaba enamorado, vio aquel viaje que siempre soñó y nunca realizo, vio aquel par de zapatos que nunca se compro y así sucesivamente vió lugares personas momentos que hubieran sido todo lo contrario si se hubiera atrevido, si se hubiera atrevido.
Cuando el hombre quiso pararse paro no ver mas vio sus piernas y brazos ya sin vida pegados siendo parte del asiento, entonces quiso voltear la cara y pudo sentir que su cuello era rígido y sin movimiento siendo parte del respaldo y por ultimo quiso cerrar los ojos y no pudo, ya no tenia párpados y el hombre se quedo en ese lugar en esa gran sala viendo su vida como hubiera sido si se hubiera atrevido... si se hubiera atrevido.
Historia leída quien sabe en donde...
El Caníbal
Por: El Joven Kappus
Aún no puedo dormir, la lluvia es violenta, la lluvia es muy violenta y el silencio es muy ruidoso a mis oídos.
Vagando en los pensamientos de calles sucias y oscuras, veo a un valedor que hace tiempo no me acordaba de el... ¿cómo?...¿cómo se llamaba?, le decían el "caníbal". Era un cabrón muy flaco y muy viajado, todo el tiempo mencionaba querer estar solo, sin embargo nunca lo estaba; la pasión lo dominaba, especialmente por un libro muy pequeño el cual llevaba consigo siempre.
¿¡Que tranza pinche caníbal, cómo estás!? El pinche caníbal parecía no oírme y actuando lentamente me contestaba, empezaba hablándome de una chava - su novia - y terminaba dándome una teoría de la estructura de las moscas. Lo más gracioso era que en ese momento le había entendido perfectamente y jamas notaba que se le iban las cabras.
Un día por la tarde - ya oscurecía - lo encontré tirado en la banqueta por Ampliación, con el libro en la mano. Me detuve a ver que le ocurría, le levante un poco la cabeza y le pregunté: ¡caníbal! ¡caníbal! ¿qué te pasa wey?... por diez segundos el cuerpo flaquísimo lo sentí frío y mis manos se paralizaron, los pies se me congelaron y la mirada se perdió.
Al haber tenido esa sensación y el haber captado ese aroma tan penetrante que llagaba, pasando por todos mis conductos nasales, hasta los pulmones, supe que el caníbal estaba muerto. En ése instante, no me importó estar junto a aquel cuerpo inmóvil, a nadie le importaría saberlo; él estaba ahí, él estaba allá y aún mi curiosidad rasgaba mi piel, ¿se habrá llevado el libro o mis ojos podrían verlo por fin? Un imponente rayo lo iluminó entre la noche y temblando, lentamente lo tomé... no lo podía creer... el caníbal se lo había llevado, el libro estaba en blanco.
Me quedé toda la madrugada ahí, casi sin respirar, sin mover ningún miembro de mi vida. Cuando dejó de llover, solo con el libro en blanco, lloré, acordándome, como en éstos momentos lo hago de él..."el caníbal".
Me di cuenta de que ahora me tocaba tener el libro y que solo lo podría leer al final de mi vida.
Contracultura: El Rostro de la Resistencia
Por: Carlos Bravo Balcazar
Se dice que estamos viviendo un cambio, que las cosas ya no son igual que en el siglo pasado y las voluntades juntas pueden construir un mejor país, pero... hay algo que no está bien, algo que no se puede definir concretamente, que no es nuevo pero tampoco desaparece, que destruye las tranquilidades y deja una sensación de nausea, una profunda insatisfacción.
Indudablemente esta insatisfacción se presenta en gran parte de la sociedad, sin embargo, son los jóvenes quienes no sólo la hacen evidente, sino que muestran diversas conductas y actitudes por medio de las cuales buscan contrarrestar las hostiles condiciones que el sistema les impone. Los jóvenes son los artífices de la resistencia.
Los jóvenes actúan contraculturalmente; se organizan, se marginan, construyen, crean y se expresan en una forma autentica y usualmente en contra de la injusticia y la opresión. Rechazan la cultura institucional, aquella que manipula, que enajena e impone, que busca dirigir el pensamiento y la voluntad de las personas. Generan elementos propios y auténticos que les dan identidad. Modifican conductas y lenguajes, van construyendo, a veces inconscientemente, el rostro de la resistencia.
La contracultura es el rostro de la resistencia. Es toda expresión, usualmente juvenil, que busca contrarrestar los efectos de la imposición de un sistema insensible y enfermo, que se descompone irremediablemente.
Aunque hacia la mitad del siglo pasado las expresiones contraculturales fueron muy significativas, no podemos encasillar a la contracultura en una época. Surge cuando las sociedades aumentan su rigidez y la distancia entre la realidad y lo que se hace creer a la misma se profundiza abismalmente. La contracultura persiste, tan sólo cambia de forma, hereda elementos y se enriquece en cada época y lugar. Cambia de rostro pero su esencia es la misma: la resistencia.
Durante la década de los sesenta los movimientos contraculturales tuvieron gran relevancia ya que se combinaron elementos de gran importancia como la guerra de Vietnam, la popularización de algunas drogas y el rock.
El vehículo predilecto de las expresiones contraculturales si descartar otras- ha sido la música y actualmente lo sigue siendo. "Dime qué escuchas y te diré quién eres". Las corrientes musicales dictan las modas en el vestido y hasta en el lenguaje e incluso en la forma de comprar,,, o de no hacerlo (ahí está Ares, Blubster, Kazza y Napster, probablemente una de las más importantes formas contraculturales de nuestro tiempo) ..
Sin duda, la contracultura es una cultura alternativa, no es subcultura, se encuentra a la altura de la cultura institucional e incluso, en ocasiones, es más original y auténtica. Responde a las necesidades que el sistema no cubre y sobre todo funciona como elemento de defensa de una parte de la sociedad que carece de los bienes indispensables que los gobiernos tienen por mandato garantizar. La contracultura es una forma de resistir; es el rostro de la resistencia.